Inteligencia Artificial: evolución que permitió la IA generativa
Para lograr los avances que se tienen actualmente, los científicos de la IA hicieron diversos experimentos y desarrollaron diferentes principios como el principio del cómputo relativo al comportamiento equivalente de Horswill (2008) donde una máquina o persona llevan a cabo el proceso correcto que lleva a un propósito específico, como sería por ejemplo, preparar una café, conducir un coche o jugar juegos de estrategia como el Go y el ajedrez.
La IA evolucionó desde las tareas simples hasta el aprendizaje, fenómeno que los humanos considerábamos como una aptitud exclusiva de las personas y de otros organismos vivos como los animales.
Alcances de la IA
La IA ha aprendido a realizar actividades cada vez más complejas, como determinar procesos a seguir, realizar actividades como preparar café, atender clientes, asistir en la construcción de productos, en el manejo de vehículos y la creación de textos, música, videos e imágenes.
En los siguientes videos se muestran ejemplos de lo que puede hacer la IA.
La inteligencia es un fenómeno de comportamiento: una entidad es inteligente porque se comporta de forma inteligente, no porque esté compuesta de tejido vivo o un alma. Lo que es más: la inteligencia es un fenómeno de computación sujeto a un análisis computacional.
El cómputo: base de la Inteligencia Artificial
El concepto de cómputo es la base de lo que se conoce como Inteligencia Artificial: máquinas que pueden realizar tareas específicas tan bien o mejor que nosotros, los humanos. Los seres humanos se dieron cuenta que instancias específicas de este proceso podrían ser moderadas, de manera tosca, a través de un procedimiento mecánico. Esto llevó a los límites de los procedimientos mecánicos y a la posibilidad teórica de que una máquina fuera inteligente.
En un ensayo titulado Computing Machinery and Intelligence, el matemático inglés Alan Turing (1950) argumentó que si una computadora podría engañar a un ser humano haciendo que éste la considerara humana, entonces esto tendría que considerarse como inteligencia, aunque ésta no fuera humana.
Bajo estos principios trabaja la inteligencia artificial del “Cerebro de Google”, conocido como “Deep Mind”, lo cual le permitió derrotar al campeón de GO, un juego de mesa muy popular en Asia.
Esta Inteligencia Artificial es la que utiliza Google para pedirte que opines sobre un negocio que visitaste; es lo que Facebook utiliza para sugerirte posibles contactos y es lo que permite a algunos teléfonos celulares reconocer el rostro del usuario.
La IA como una ayuda para el ser humano
La Inteligencia Artificial es uno de los pilares sobre los que descansan las mejores esperanzas y las peores pesadillas del ser humano.
Esperanza porque puede servir para identificar, por ejemplo, patrones de enfermedades mediante la visualización de datos.