Interpretación de los datos con énfasis en sus implicaciones pedagógicas

Este escenario, donde los estudiantes utilizan la IA para “hacer tareas” sin comprender sus fundamentos, no es simplemente un acto de “hacer trampa”, es un síntoma de una desconexión entre la herramienta y el propósito del aprendizaje.

Lo anterior se puede desglosar en varios puntos críticos:

 

1.      El uso de la IA como una “Caja Negra Mágica”:

Los estudiantes están tratando a la IA generativa como una máquina expendedora de respuestas. Introducen una pregunta (un prompt formulado de manera incorrecta) y reciben un producto terminado.

Implicación Pedagógica: Se anula por completo el proceso de aprendizaje. La educación no consiste en entregar un resultado correcto, sino en desarrollar las habilidades para llegar a él: investigación, análisis, síntesis, argumentación y redacción. Al usar la IA de esta manera, el estudiante externaliza el esfuerzo cognitivo, convirtiéndose en un mero intermediario de información. No aprende, solo entrega.

 

2.      La Ilusión de competencia profesional:

El estudiante entrega una tarea que parece coherente, bien escrita y correcta y recibe una buena calificación. Esto crea una ilusión de competencia: el estudiante (y a veces los docentes) cree que ha alcanzado el objetivo de aprendizaje, cuando en realidad lo único que se ha demostrado es la habilidad de copiar y pegar.

Implicación Pedagógica: Este es un riesgo. Como futuros profesionistas, algunos estudiantes carecerán de las habilidades fundamentales que sus títulos certifican. No sabrán investigar, ni redactar y no serán conscientes de su falta de habilidades para desempeñarse correctamente en el ámbito profesional.

 

3.      La ausencia de pensamiento crítico y la aceptación de sesgos:

Si un estudiante no sabe qué son los sesgos en la IA (de género, raciales, políticos, culturales), ¿cómo podría identificarlos? Aceptará el texto generado como una verdad objetiva, sin cuestionar la fuente, la veracidad o la perspectiva de la información.

Implicación Pedagógica: Si docentes no abordamos el tema e intervenimos, estamos convalidando, inconscientemente, la habilidad más importante que la educación superior debe fomentar: el pensamiento crítico.

En lugar de formar ciudadanos escépticos, analíticos y reflexivos, corremos el riesgo de formar consumidores pasivos y acríticos de información, incapaces de distinguir entre un argumento bien fundamentado y una alucinación de una Inteligencia Artificial Generativa como ChatGPT.

4.      Desaprovechamiento de la IA para aprender de forma efectiva y más rápida:

La ingeniería de prompts no es solo una habilidad técnica; es un ejercicio de metacognición. Para escribir un buen prompt, un estudiante necesita:

 

  • Tener claridad sobre lo que quiere saber.

  • Definir el contexto, el tono y el formato.

  • Anticipar las posibles debilidades de la IA y guiarla.

 

Implicación Pedagógica: Al no enseñarles a interactuar deliberadamente con la IA, les estamos robando la oportunidad de usarla correctamente: La IA bien utilizada es una herramienta potente para explorar ideas, estructurar el pensamiento, refinar argumentos y aprender. Los estudiantes no la están usando para pensar mejor, la están usando para evitar pensar.

 

5.      Implicaciones éticas y de integridad académica:

La falta de conocimiento sobre los principios éticos es la puerta de entrada al plagio involuntario (o voluntario) y a la deshonestidad académica. El estudiante no valora el proceso intelectual porque la herramienta le permite saltárselo con facilidad.

Implicación pedagógica: Debemos redefinir lo que constituye el trabajo original. El valor ya no puede residir exclusivamente en el producto final ( el texto), sino en el proceso documentado de creación, que puede y debe incluir el uso transparente y crítico de la IA